Una estudiante de 19 años estuvo a punto de ser detenida anoche por policías de Robos y Hurtos al mando del comisario Carlos Castillo, porque el brutal asalto que dijo haber sufrido el martes sobre las 20 en Comandante Cabot, al Oeste de Hipólito Yrigoyen, en Rivadavia, era un invento para no volver a su casa por problemas con sus padres, dijeron fuentes policiales. La chica, de apellido Ríos, había dicho que tres sujetos le robaron su campera, una cadena de oro, un monedero y un celular, durante una paliza que la dejó inconsciente hasta que se recuperó y pudo pedir ayuda. Pero incurrió en contradicciones, se quebró y confesó que inventó todo (sus pertenencias las tiró) porque no quería volver a su casa. No quedó presa porque no denunció, informaron en la Policía.
