San Juan, 10 de febrero.- Un juicio con tintes históricos, por el tipo de delito que se los juzga pero fundamentalmente por la cantidad de integrantes de una banda narco, 15 en total, tuvo final esta tarde en la sede del Tribunal Oral Federal.
Quien tuvo la condena más dura fue Sandra Erica Monasterios (42), quien según la instrucción llevada adelante era la líder de la banda, llegando incluso a manejar los hilos desde una cárcel mendocino. La mujer recibió 9 años de prisión.
En tanto que otros 8 integrantes fueron sentenciados a 7 años, 3 sujetos a 6 años, una mujer a 3 años de prisión en suspenso y 2 absueltos.
Cómo actuaba la banda y la forma en que cayó
Siete mendocinos y ocho sanjuaninos fueron los juzgados por su vinculación al secuestro de más de 15 kilos de cocaína, en dos operativos concretados el 21 de septiembre y 16 de noviembre de 2012, ambos en Sarmiento. El grupo más numeroso de imputados, 13 en total (6 mendocinos y 7 sujetos de San Juan), era liderado vía telefónica por Sandra Erica Monasterios (42) desde la cárcel de El Borbollón, en Mendoza, donde cumplía una condena de 4 años por drogas, según el expediente. La mayoría, estában complicados por escuchas telefónicas.
Ambos cayeron la madrugada del 16 de noviembre de 2012 en el control de San Carlos, Sarmiento, cuando traían unos 8,101 kg de cocaína en la rueda de auxilio del remís que guiaba Jorge Orlando Sánchez. Esa vez también cayó presa la exnovia de Montenegro, Jésica Abrego.
Esta última y el remisero negaron saber del tráfico. El chofer dijo que fue contratado para ir a Mendoza, que allí sufrió problemas con las ruedas y se las dio a Cruz para arreglarlas sin saber que metería cocaína. La chica dijo que Montenegro esa noche la invitó a bailar a Mendoza.
Cruz, en cambio, admitió la maniobra, parcialmente. Dijo que la droga era suya, que Montenegro fue a comprar, que la metió en el auxilio en la gomería de su exsuegra en Guaymallén y que venía a San Juan a cobrar. También dijo que eran suyos otros 5,200 kg hallados en la casa de su madre, Carmen Patricia Cruz (34), y suyo un revólver hallado en casa de su abuela Carmen Cruz (70 años, arresto domiciliario). Ambas negaron cualquier relación con los hechos.
Magalí Quiroga (23, hija de Monasterios) también intentó desligarse, aunque reconoció que venía a San Juan a buscar plata porque la mandaba ‘Yony’. Su hermano adoptivo, Alex Tejerina, negó estar ligado pero reconoció que una vez vio a Cruz y Montenegro armar un auxilio con cocaína.
Otros dos supuestos nexos locales fueron Claudia Flores (38), su expareja Carlos Alberto Figueroa (29) y el sobrino de la mujer Emanuel ‘Nolo’ Salinas (22). Todos rechazaron cargos.
El remisero local Hugo Montiveros (37) quedó ligado a la banda de Monasterios. Y también al hallazgo de unos 2 kg de cocaína en Media Agua el 21 de septiembre de 2012. Los traía de Mendoza María Ghisleni (24) y cuando la sorprendió Gendarmería los llevó hasta la Terminal, donde la esperaban Montiveros y el también remisero Alfredo Guzmán (42).