Natasha Irina Romero, la joven de 23 años que desapareció el último viernes de la ciudad bonaerense de Wilde, partido de Avellaneda, fue hallada ayer sana y salva en la terminal de ómnibus de Capital. El caso tuvo una masiva difusión y un gran cuota de tensión, ya que su familia pensaba lo peor a causa de la conflictiva y ‘violenta’ relación con su pareja, Jorge Ramos (42) quien la golpeaba y la había llevado a alejarse de su familia y hasta de su propio hijo de 3 años, dijeron. Tan complicado parecía el vínculo, que la chica dijo haber sido golpeada en la terminal, antes de ser localizada, informaron fuentes oficiales y la abogada Claudia Ruiz, integrante del Foro No a la Trata en San Juan.

Justamente Ruiz fue quien recibió el primer llamado desde Avellaneda con el dato de que la joven había realizado un llamado brevemente a su casa desde un teléfono de la terminal de ómnibus (la línea de su familia estaba intervenida).
Según Ruiz, fue ella quien informó de la posible presencia de la chica en la terminal a la dirección de Protección para Personas en Riesgos Sociales del Ministerio de Desarrollo Humano, y ayudó a encontrarla, angustiada, en la boletería de una empresa de colectivos. Al parecer, ya había sacado un pasaje para volver a Buenos Aires.

Todo indica que la joven vino a San Juan con Ramos en un automóvil, aunque ayer se desconocía por qué razón y con qué objetivo arribaron a esta provincia. También se desconocía el destino de Ramos tras el hallazgo.

El caso es investigado por autoridades judiciales de Avellaneda, donde arribará la joven en las próximas horas para dar su versión de los hechos. En San Juan, el caso es diligenciado por autoridades del Cuarto Juzgado Correccional.