Dos hermanitos se pusieron a jugar con un encendedor y sin querer provocaron un desastre en su casa en Pocito. La travesura generó un incendio en el dormitorio principal y las llamas propagaron por casi toda la casa destruyendo artefactos electrónicos, muebles, ropa de todo tipo y hasta los documentos de los cinco integrantes de la familia.

Sólo nos quedó la ropa que tenemos puesta. Los niños andan descalzos, se nos quemó todo
MARIO TORRES - Damnificado del incendio

Los uniformados del Destacamento de Bomberos en Rawson consiguieron extinguir el fuego y salvó lo que era la cocina comedor, no así los dos dormitorios de esa vivienda de adobe y techo de caña de calle Granaderos al 651 en Villa Aeroparque, Pocito. Las pérdidas para Belén Herrera, su pareja Mario Torres y sus tres nenes, de 7, 5 y 4 años fueron importantes porque se les quemó un televisor, un sommier dos plazas y tres camas de una plaza, otros muebles, la ropa de cama, un placard, un Dvd, un equipo de música, una notebook, todas las prendas de vestir y los calzados y los DNI, contaron ellos mismos.

El siniestro se originó alrededor de las 10.30. "Dejé a los chicos solos y fui al almacén. Cuando venía llegando, salieron los chicos gritando para avisarme que se estaba prendiendo fuego mi dormitorio. Cuando entré, ya eran grandes las llamas", relató Belén Herrera, quien alquila esa vivienda. La mujer alcanzó a sacar a los niños, mientras que los vecinos arrojaron agua hasta que llegaron los bomberos. Según la Policía, más tarde uno de los chicos contó que jugaba junto a otro hermano con un encendedor y prendieron fuego un colchón.