Ayer se conoció que Marcial Gil, hermano del exintendente de Caucete Julián Gil, fue detenido acusado de montar un comercio ilegal de carne de dudosa procedencia, luego de secuestrarle 430 kilos de carne, balanzas, ganchos, freezers, máquinas moledoras, bolsas y otros elementos de carnicería, dijeron fuentes judiciales. Ahora trascendieron imágenes de restos encontrados en un terreno cercano al lugar del allanamiento que demuestran que la carne que se comercializaba en distintas zonas de la provincia era de caballos.

En las fotos se pueden observar huesos, pezuñas y cabezas de estos animales que fueron faenados y quedaron desparramados sobre el terreno.

Además de tachos y cuchillos con los que realizaron la tarea.

Sumado a eso, se observa un pozo repleto de restos que, aparentemente, iban a ser cubiertos.

Los pesquisas de la División Policía Rural tenían el nombre de Marcial Gil en la mira por presunto cuatrerismo. Por lo que, cerca del mediodía de este viernes, los investigadores se apostaron en las inmediaciones de La Plata y Rastreador Calívar, en la zona de La Puntilla, en las afueras de Caucete. Tenían el dato que allí, frente a la Bodega Arenas y en el mismo predio donde hay un hotel alojamiento que está en construcción, funcionaba la carnicería clandestina del sospechoso. 

Allí interceptaron el auto de un hombre que dijo ser de Rawson y que admitió que había salido del "local" de Gil. En el baúl, sin ninguna medida sanitaria, llevaba aproximadamente 70 kilogramos de carne que, según explicó, le habían vendido en ese lugar sin entregarle ningún comprobante o factura. Para peor, el hombre rawsino reveló a los pesquisas que la carne no era de vaca, sino de caballo, y les dijo que luego era mezclada con grasa y vendida a puestos de comida callejera.

Cuando los policías irrumpieron en el lugar estaba Marcial Gil con sus dos hijos mayores de edad. Según fuentes judiciales, además de que el comercio no está declarado ni inscripto como corresponde, no contaba con medidas de seguridad ni mucho menos sanitarias. 

Por otro lado, los uniformados encontraron dos armas de fuego, precisamente una escopeta calibre 16 y un rifle calibre 22. Por ese hallazgo intervino el fuero de Flagrancia, por lo que en las próximas horas Gil será juzgado por la presunta tenencia ilegal de las mismas, señalaron los voceros. 

El lugar fue clausurado y Gil detenido, mientras que sus hijos zafaron pues toda la evidencia recolectada hasta el momento apunta a que Marcial era quien comandaba ese negocio clandestino. La hipótesis de los investigadores es que hasta su local llegaban comerciantes de casi toda la provincia, indicaron. Y que él faenaba los animales y les vendía la carne.