Un hombre fue condenado ayer a 25 años de prisión por haber violado a siete mujeres entre 2002 y 2004 en la localidad bonaerense de Libertad, partido de Merlo. La sentencia fue dictada por el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 1 de Morón contra Martín Francisco Vera, quien fue hallado responsable, en dos casos, por "abuso sexual" con el uso de armas.
"Esperábamos una condena que fuera coherente con la situación que le tocó vivir a las chicas. Hoy no tenemos una sumatoria de penas sino de hechos, que fueron aberrantes y por los que la fiscalía había pedido 46 años", dijo Héctor Ibarra, titular de la Asociación Li-May, que ayuda a víctimas de violaciones.
Tras conocer el fallo, Ibarra lo calificó de "vergonzoso" y dijo que "había pruebas suficientes, ADN en todos los casos y la confesión del violador" para aplicar la pena solicitada por el fiscal Antonio Ferreras.
Ibarra consideró que tal vez fue un error incorporar por lectura la declaración de las víctimas y que sólo se escuchara a una porque de esa forma los jueces no tuvieron el relato directo de todas las damnificadas.
Las violaciones que Vera confesó durante el juicio fueron cometidas entre 2002 y 2004 en la localidad de Libertad y su accionar era siempre el mismo. Durante varios días se encargaba de estudiar los movimientos de sus víctimas, la mayoría de ellas casadas, y, cuando las mujeres estaban solas, entraba a sus casas, las golpeaba, las violaba y a algunas les robaba.
El condenado es un albañil y fue reconocido porque en una de las violaciones una de las víctimas le bajó la cuellera polar y descubrió que era su vecino.