Tiene una pequeña gomería, fabrica cañizos y por otro lado hace fletes, porque dice que la situación económica está difícil y no alcanza con hacer una sola cosa. Pero por un tiempo deberá olvidarse de esa última actividad, porque ayer le prendieron fuego a su principal herramienta para esas tareas, su camioneta Peugeot 504 modelo "78, valuada por la víctima en unos $250.000. "Esto me corta las piernas, es lo que tenía para laburar", dijo Diego Ponce (43) con mucha angustia. Y también tenía bronca, porque los investigadores determinaron que el vehículo fue blanco de un ataque intencional, puesto que no tenía batería ni nada que iniciara un incendio por accidente.

La Peugeot estaba estacionada en el frente de la casa 2 de la manzana 46 del Barrio Valle Grande de Rawson, propiedad de un vecino mecánico al que se la había llevado hacía unos 10 días para que le rectificara el motor. Ese hombre sobre las 23 del domingo salió con su familia y al rato le llamaron para avisarle que la camioneta estaba en llamas. "No tengo problemas con nadie, no sé quién pudo haber hecho esto", afirmó el mecánico. Ponce por su parte también aseguró desconocer el motivo del ataque, aunque deslizó que quizás "fueron unos niños o alguien que simplemente quiso hacer daño".

El fuego destruyó el interior de la Peugeot, la parte donde va el motor y parte de las chapas de afuera. Quedó muy dañada.