Había sido una distendida reunión en familia. A eso de la 1 del domingo pasado, salieron a compartir una cena en la plaza departamental y alrededor de las 5 volvieron, cansados y los varones con algunas copas demás. Los dueños de casa se fueron a su dormitorio y en otras dos habitaciones se acomodaron sus dos hijos (un varón y una mujer) con sus respectivas familias. Un par de horas después, sin embargo, esa buena relación familiar se vio empañada por un hecho detestable: El hijo de los dueños de casa, un obrero de 23 años, abandonó su habitación y se metió al dormitorio donde dormían su hermana con su marido. Y no lo dudó: comenzó a someterla sexualmente hasta que la joven, cansada y entredormida, empezó a sentir dolores y despertó. Entonces vio algo que no hubiera querido ver, porque el sujeto al que ella le decía que se detuviera no era su pareja, como pensaba, sino su propio hermano. Al verse sorprendido, el sospechoso intentó ocultarse bajo la cama. Pero entonces su hermana, de 24 años, despertó a su pareja y cuando hablaban en voz baja, el joven en calzoncillos se levantó y, sin mirarlos, salió de la habitación cerrando la puerta detrás suyo.

Instantes después hubo escándalo. Porque la joven fue a contarle todo a su papá, que en el acto increpó a su hijo. En medio de la discusión, la pareja del joven obrero también le dio una bofetada.

Esa mañana, la joven y su familia se fueron a la casa de sus suegros. Y allí recibió un llamado de la mujer de su hermano, en la que le contaba que por la noche lo había sorprendido espiándola mientras se cambiaba. Esa mañana grabó esa conversión y la aportó como prueba cuando fue a denunciar el hecho a la UFI CAVIG, el domingo a las 15,30. Instantes después, el fiscal Francisco Pizarro y el ayudante fiscal Omar Galiano, le pidieron al juez Javier Figuerola que lo metiera preso, cosa que se concretó a las 22,50.

Fiscalía pidió un año de prisión preventiva e igual plazo para investigar. El defensor, Claudio Vera, propuso 9 meses de investigación y que su cliente sea liberado o, en todo caso, permanezca 30 días con preventiva en la subcomisaría de Los Berros, Sarmiento. El magistrado, finalmente, aplicó 45 días de preventiva al obrero y dio 1 año de plazo para investigar. Ahora, Fiscalía podría solicitar un examen de ADN con muestras extraídas del cuerpo de la víctima.