Un violento de 33 años, identificado como Muslum Aslan, quien había sido liberado la semana pasada de una cárcel en Turquía, debido a la ola de contagios por coronavirus que azota al país, asesinó brutalmente a su pequeña hija de tan solo nueve años. 

El malviviente fue detenido en 2019 por apuñalar a su esposa, pero salió en libertad después de que el gobierno turco haya aprobado las medidas de reducir las condenas para casi un tercio de los presos. Al salir, el hombre llegó retornó al domicilio donde vivía junto a su cónyuge, en la provincia de Gaziantep.

Según informó el portal británico The Sun, el individuo empezó a discutir con la mujer, debido a que agredió a la criatura de nueve años. Al llamar a la Policía, Aslan escapó de la vivienda, pero fue detenido en un parque.

La nena fue trasladada a un centro de salud, pero los médicos no pudieron salvarle la vida. La madre de la víctima manifestó: “Él usaba la violencia contra mis hijos todo el tiempo. Colgó a mi hija de sus brazos a la pared y la golpeó con la manguera. Al dejarla ensangrentada se fugó. Ella está muerta y este asesino debe ser castigado por lo que hizo”.