Lo que nunca imaginó Juan Ignacio Sánchez (25), un conductor experto en maniobras de riesgo que trabaja en series y películas, es que se vería obligado a usar su habilidad fuera de un set de grabación para salvar su vida. Fue abordado por un grupo de ladrones cuando estaba por estacionar su camioneta, pero al ver que uno de los delincuentes iba a apuntarle con un arma, dio marcha atrás a toda velocidad en medio de una avenida y evitó el asalto. Pero la maniobra fue más compleja de lo que se vio en las cámaras de seguridad: Juan aceleró el vehículo completamente recostado para evitar un posible disparo.

“Hice la maniobra sin mirar, a ciegas”, recordó la víctima en diálogo con Infobae. La banda, al ver frustrado su plan, disparó y huyó.

El dramático episodio ocurrió el martes pasado minutos antes de la 19, sobre la avenida Presidente Perón (ex Gaona), en la localidad bonaerense de Villa Sarmiento, partido de Morón. Hasta allí, Juan Ignacio había llegado en su camioneta para buscar a un amigo con el que tenían planeado salir a comer. A poca velocidad, el joven fue acercándose de a poco al cordón de la vereda hasta que de pronto la banda de delincuentes le cruzó el auto. En ese momento, uno de los sospechosos amagó con descender, empuñó el arma con la clara intención de abordar a la víctima, aunque el plan saldría mal.

De acuerdo con lo que se ve en el video de las cámaras de seguridad del Municipio, el joven aceleró marcha atrás y frustró el asalto. “Cuando frené, lo hice con cuidado porque había una chica y no quería asustarla. Cuando termino de frenar, se cruzó el vehículo de los delincuentes que venía de la mano rápida hacia donde estaba estacionado”, relató Sánchez, quien segundos antes de decidir que iba a detenerse en ese lugar ya estaba alerta de que algo podría ocurrir.


“Yo veo que el vehículo ya viene con la puerta abierta, entonces yo presté atención a ver qué hacía. Puse marcha atrás para ver qué hacía y cómo reaccionar. Cuando veo que la persona que estaba del lado del acompañante abre completamente la puerta, tiende a bajar hacia mí y me apunta, yo efectué la maniobra”, agregó.

Un detalle que casi es imperceptible en la filmación es que Juan Ignacio apeló todavía más a su experiencia como doble de riesgo para hacer de la maniobra de escape algo más complejo y seguro para su vida. En los pocos segundos que duró la secuencia y la tensión del robo, el joven tuvo la tranquilidad para ocultarse dentro de su camioneta y acelerar igualmente.

“Para no quedar sentado de frente dándole la cara, yo me acosté del lado del acompañante para esconderme de cualquier disparo para que no me pegue. Frené en la esquina que había unos autos y ahí los ladrones se fueron, tiraron pero a la camioneta no le pegaron. Hice la maniobra sin mirar, acostado. Me apuntó y me acosté para estar cubierto con el tablero de la camioneta. Como es más alta que el auto de ellos, tenía más posibilidad de salvarme y hacer la maniobra”, relató. Además, tuvo la fortuna de que ningún auto venía por la avenida Presidente Perón.

Una profesión de riesgo que le salvó la salvó la vida

Hace unos cinco años, Juan le comentó a un amigo que era dueño de varios autos de alta gama una propuesta para que esos vehículos le generaran dinero, en lugar de tenerlos estacionados en un garaje. El plan básicamente consistía en alquilarle esos autos a empresas que trabajaran con productoras de contenidos audiovisuales para que los usaran en filmaciones. La idea fue un éxito y de a poco fueron ganando varios clientes.

Sin embargo, la empresa —Cars for Films Argentina— no se limitó con ese negocio y para no estancarse, decidieron ellos mismos alquilarle sus autos a las productoras, pero sin intermediarios. Fue así que la sociedad con su amigo creció todavía más y empezaron a llegar los contratos con empresas de relevancia.

“Empecé de a poco. Primero le alquilaba autos a otras empresas y luego fui armando de a poco mi propia empresa. Ya hemos hecho varias series. Hemos participado en películas, series y comerciales de marcas importantes”, contó Juan a este medio. Pero al poco tiempo vino la acción que le daría el plus que los distingue como empresa.

Al joven siempre le gustó conducir y decidió hacer cursos de manejo defensivo acá y en el exterior. Sabía que podría ser un servicio más para ofrecer en su empresa y que, además, en Argentina se trata de un negocio que todavía no es tan popular como en otros lugares. Vio la oportunidad, se preparó y lo explotó.

“Hice unos cursos de manejo defensivo en el autódromo acá. Por eso estoy acostumbrado a hacer ese tipo de maniobras como la del robo. Empecé con los alquileres y luego comencé a estudiar manejo de maniobras peligrosas. Hice cursos y armé la empresa”, relató el joven, quien destacó que lograron trabajar en series de Netflix como la Reina del Sur, que filmaron en Buenos Aires o en Diario de un Gigoló, que es española. “Hicimos comerciales de varias marcas de autos, también de empresas petroleras”, añadió.

En ese sentido, el joven empresario relató algunos de los curso que tomó de manejo, que dan cuenta que realmente es un experto. Estuvo en Estados Unidos, en el país también tomó un curso para pilotos de carrera, en el que se obtiene licencia y tomó un curso con expertos de marcas como Toyota o Audi. “En Argentina no hay una escuela particularmente dedicada a este tipo de manejo, que esté homologada. Ojalá la haya en un futuro”, acotó el joven, quien se define como un precision driver (conductor de precisión).