Por segunda vez en un año, un ginecólogo de Chos Malal, en Neuquén,  fue condenado por haber abusado sexualmente de dos mujeres durante consultas médicas. Por el juicio anterior lo habían condenado a un año de prisión en suspenso y dos de inhabilitación de la matrícula.

El jueves, la jueza Leticia Lorenzo halló a Dardo D’Orazio penalmente responsable del delito de abuso sexual simple reiterado. Esta vez, eran dos las mujeres que lo habían denunciado luego de que en marzo fuera condenado por otro caso.

Abusos en el consultorio

“Creo que este fallo es ejemplificador porque hace que se replanteen cosas del paradigma médico”, confió una de las mujeres que llevó a D’Orazio nuevamente al banquillo de los acusados. “Yo había hecho la denuncia en el hospital para que le iniciaran el proceso sumarial, pero en el Ministerio de Salud no hubo respuesta y después pasó lo de esta chica, fue como que me cayó la ficha y decidí hacer la denuncia penal”, relató la mujer.

Ambas denunciantes, que ahora tienen 40 y 37 años, habían sido pacientes de D’Orazio en el hospital de Chos Malal durante varios años y mientras cursaban sus embarazos. “Siempre sentía que él se pasaba de la raya, pero nunca me animé a ponerle el nombre de abuso. Volvía a mi casa y le decía a mi marido ‘me tocó el culo’”, contó.

El fiscal Agustín García llevó adelante la acusación por cuatro hechos en perjuicio de una de las víctimas y, en el caso de la otra, por tres hechos, entendiendo que hubo “abuso coactivo aprovechando una relación de poder de médico hacia la paciente”. El ginecólogo ya había sido condenado en marzo a un año de prisión en suspenso y dos de inhabilitación por el delito de abuso sexual simple.

En el juicio anterior, también por abuso sexual simple, la víctima había denunciado que durante una consulta el ginecólogo se había sacado el pantalón, quedando desnudo. El 21 de marzo un tribunal lo condenó a un año de prisión en suspenso y lo inhabilitó por el doble de tiempo.

“Pasó mucho tiempo hasta que entendí que eso era abuso. Encima, acá en Chos Malal no tenés muchas alternativas. Te atendés con el médico que podés, no siempre podés elegir”, detalló la mujer.

En el juicio, el fiscal Agustín García pidió remitir al Colegio de Psicólogos la documentación sobre la actuación de la profesional que intervino como perito de la defensa, para que evalúen su desempeño. “Quedó claro que estaba distorsionando algunas cosas”, explicó García, y sostuvo: “La jueza condenó tal cual lo que se sostuvo desde la fiscalía a lo largo del juicio”.

Este caso, como el del ginecólogo Guillermo Focaccia en la capital neuquina, dejó al descubierto los abusos que ocurren en los consultorios, donde se replica también el abuso de poder.

Fuente: lmneuquen.com