La rivalidad entre jóvenes de los barrios Los Plátanos y Los Médanos de Rawson tuvo un nuevo capítulo ayer por la tarde con el trágico resultado de un chico de 13 años muerto de un balazo en el pecho. El primer enfrentamiento se habría dado en un predio donde se dieron cita por la colonia de verano. Ahí se tomaron a golpes, pero más tarde la disputa se trasladó a las calles de esos barrios y en medio de la batahola salió ese disparo mortal que acabó con la vida de ese menor, según la Policía. Tras la muerte se desató nuevamente la furia, al punto que atacaron dos casas y un auto a pedradas y palazos.
Anoche, los policías de la Subcomisaría del Bº Ansilta no tenían bien claro cómo se dieron los hechos y aún no identificaban al asesino de Axel Gabriel Mercado de 13 años (también se dijo que tenía 14) que vivía en la manzana O del Barrio Los Médanos, muy próximo a Los Plátanos, confirmó la Policía. Tras los incidentes, la Brigada Sur detuvo a un adolescente y a un joven de apellido Rosales (19), que protagonizaron la gresca, señalaron en la Fuerza.
Al cierre de esta edición, la versión policial era que numerosos adolescentes y jóvenes de esa zona de Rawson se reunieron ayer tarde en el predio de un camping para participar de la colonia de verano. Supuestamente hubo un cruce verbal entre un grupo del barrio Los Plátanos y otro de Los Médanos y se trenzaron a golpes. A eso de las 19 se volvieron a cruzar, pero ya en una de las calles que divide a los dos barrios. Hubo trompadas, palazos, pedradas y corridas, relataron. Los incidentes se trasladaron hasta la manzana O del barrio Los Médanos.
Un familiar de Axel contó a la Policía que el chico salió a ver la gresca y se paró en la entrada de su casa. Fue en esos momentos, cuando él estaba apoyado en el marco de la puerta, que recibió el impacto de bala cerca de la tetilla izquierda. Allegados a la familia señalaron que el autor del disparo andaba en una moto y que después escapó, pero esto no fue confirmado por la Policía. Lo que se sabe es que Axel fue auxiliado por sus padres y luego trasladado en un patrullero al Hospital Marcial Quiroga, donde ingresó a las 19,30. Para entonces, el chico ya estaba muerto.
La batahola continuó, más todavía al conocerse la muerte del menor. Decenas de policías de distintas unidades y hasta la Guardia de Infantería tuvieron que dispersar a los tiros a los revoltosos, igual eso no evitó que una muchedumbre atacara a pedradas las viviendas de las familias Rosales y Camargo en el Bº Los Plátanos. También destruyeron un auto. Es que hacían responsables de la muerte de Axel a algunos miembros de esas familias. Anoche, estos últimos se estaban mudando.