El juez de garantías Matías Parrón clausuró la investigación y elevó ayer a juicio la causa contra Diego Roberto Espejo, el joven de 28 años que está acusado de cometer un doble homicidio agravado contra su novio agente de Policía, Oscar Armando Mura (28), en la madrugada del 19 de marzo pasado en un departamento del barrio Sarmiento, Chimbas, que ambos alquilaban. Para el fiscal de la UFI de Delitos Especiales, Francisco Micheltorena, y su ayudante, Francisco Pizarro, Espejo mató de cuatro disparos a quien fuera su pareja durante cinco meses, porque estaba enamorado y la víctima le había anticipado que lo iba a dejar.

A Espejo le atribuyen el agravante de la alevosía (matar a traición) y por la relación de pareja, porque Fiscalía considera que esa madrugada efectuó los disparos cuando Mura no pudo defenderse y luego se puso las esposas para simular otra situación.

En el extremo opuesto, los defensores Gustavo de la Fuente y Juan Manuel Vargas sostienen que ocurrió lo contrario, es decir que el policía lo esposó y en medio de un forcejeo su cliente mató como reacción extrema, pues "vivía un calvario con el policía".