Un hombre que asesinó a una joven de 75 puñaladas y golpes con una mancuerna en la ciudad rionegrina de General Roca, fue condenado a 5 años de prisión por un tribunal que entendió que actuó de manera culposa porque estaba alcoholizado.

Por eso le aplicaron la pena máxima por "homicidio culposo", ya que el tribunal entendió que al beber deliberadamente antes de matar, actuó en forma negligente y sin intención.

El fiscal, Eduardo Luis Rodríguez Trejo, aseguró a Télam que se encuentra "en pleno análisis de los fundamentos de la sentencia" de la Cámara Segunda en lo Criminal de General Roca, pero anticipó que pedirá la revisión del fallo por un tribunal superior.

El condenado es Ramón Sosa (32), quien llegó a juicio acusado del homicidio calificado de Laura Nahuelcar (22), quien el 27 de febrero de 2008 murió como consecuencia de 75 heridas producidas en todo su cuerpo, entre cuchilladas y golpes de mancuerna. Nunca se pudo establecer el móvil del crimen, aunque cuando fue apresado Sosa, tras avisar a un vecino e intentar cortarse las venas, habló que era "por los cuernos".