EL LUGAR. El cadáver de la criatura fue localizado en un descampado en los fondos de una casa, porque hasta allí fue trasladado por un perro. Llevaba varios días de fallecido y le faltaban extremidades.


Restos de un bebé que llevaba varios días de fallecido y al que le faltaban algunas extremidades por la posible acción de alimañas, fueron hallados ayer en los fondos de una casa de una zona rural entre Corralitos y Colonia Segovia, en Guaymallén, Mendoza. Según el diario Los Andes, el hallazgo fue posible porque el cadáver fue trasladado por un perro hasta la casa de sus dueños, quienes avisaron de inmediato del macabro episodio a la Policía.
Un primer abordaje del cuerpo por parte de un médico policial, habría determinado la existencia de un golpe en la cabeza de la criatura. Y por eso ayer todo parecía indicar que estaban en presencia de un homicidio, que sería agravado y castigado con perpetua si se establece con precisión si su madre tuvo relación con el deceso.

El cadáver fue hallado en un descampado de la calle Tabanera al 8.500, sin algunas de sus extremidades y con evidentes signos de descomposición, precisaron voceros del caso.

La primera misión de los investigadores ayer era establecer si la o los posibles homicidas son de la zona o si arrojaron el cuerpo en ese lugar, con la clara intención de no ser localizados.
Por eso buscaban testigos, registros en posibles cámaras de seguridad u obtener datos, aunque sea en forma anónima, para esclarecer el hecho.

El resultado del análisis que realice el médico forense en el pequeño cadáver, era esperados por los pesquisas porque a partir de ese peritaje podrían obtener más pistas, como la antigüedad del deceso o la mecánica de la muerte.