No tiene problemas con nadie, ni de dinero ni con ninguna persona de su entorno. Al menos eso es lo que dijo un comerciante sobre el dañino ataque del que fue blanco ayer en la madrugada su camioneta que tenía estacionada en la puerta de su casa, ubicada en avenida Ignacio de la Roza y Güemes, Capital. Y es que alguien vino y le prendió fuego a la caja del rodado, dijeron fuentes policiales. Las llamas se propagaron rápidamente hacia el habitáculo y el comerciante las combatió pero no logró evitar que el fuego afectara el asiento, alfombras y parte del tablero, lo que le causó daños por unos 10.000 pesos hasta que llegaron los bomberos y extinguieron el incendio, aseguró el damnificado.
Según Antonio Jurcic (40), la víctima, es finquero y hace cerca de un año que vive junto a su familia en un departamento en la céntrica esquina Noroeste de Ignacio de la Roza y Güemes. Justamente de ese costado de la avenida siempre dejaba estacionada su camioneta Ford F-150 que usaba diariamente para ir a trabajar, contó.
Eran alrededor de las 3, cuando una explosión despertó de golpe a Jurcic. Cuando se asomó por una ventana, vio el resplandor de las llamas que alcanzaban los 2 metros de altura y que salían de la caja de la camioneta. "El ruido que escuché fue de cuando el vidrio trasero estalló. Ahí bajé corriendo las escaleras y con el matafuegos, traté de apagar el fuego. Pero sólo me alcanzó para extinguir la parte trasera de la camioneta", precisó Jurcic.
Las llamas se propagaron hacia el interior y afectaron el asiento del rodado, consumió los cinturones de seguridad y destruyó las alfombras y parte del tablero, relató. Al cabo de unos minutos aparecieron los bomberos y apagaron por completo el incendio provocado, comentaron en la policía. El caso quedó en manos de la comisaría 1era.
"No tengo problemas con nadie ni le debo plata a nadie. Por eso no entiendo quién me pudo hacer algo así… seguro fue un mala leche que iba pasando y la quemó. Calculo que voy a tener que gastar unos 10.000 para arreglarla porque el seguro no me cubre pérdidas parciales. Realmente en este país estamos solos, totalmente desamparados", afirmó indignado el comerciante.

