El exempresario del transporte y productor José Armando Aranda (52), anteriormente condenado por abusador y ladrón, es uno de los sospechosos detenidos en la causa por el narcotaxi, destapada el pasado jueves cuando la Policía interceptó en Trinidad a un remisero que transportaba 56 kilogramos de marihuana, confirmaron fuentes policiales.

Junto a Aranda hay otros seis sospechosos apresados: un penitenciario, un interno del Penal de Chimbas, el taxista y tres mujeres, revelaron desde la Fuerza. Todos ellos están acusados de integrar una red dedicada al comercio de estupefacientes.

El vehículo fue interpectado en calle Francisco de Villagra, entre Mendoza y General Acha, Capital. Los pesquisas tenían datos y dieron en el blanco, pues al revisar el baúl encontraron unos 50 paquetes de marihuana. Luego de ese hallazgo, los investigadores se abocaron a realizar diversos allanamientos para intensificar la búsqueda de pruebas y sospechosos. Y en esa misma mañana llegaron hasta el domicilio de Aranda, en inmediaciones de Jujuy y Avenida Libertador, en pleno centro de la provincia.

Allí los efectivos de Drogas Ilegales se presentaron (cerca de las 12.30) y consultaron a Aranda si tenía elementos vinculados a la causa. No trascendió si en ese lugar hallaron droga. Sí que él manifestó que arriba de un placard en una de las habitaciones tenía dos armas de fuego, una pistola calibre .22 con cargador y silenciador, y una escopeta calibre 12 doble caño, ambas sin cartuchos. Los efectivos comprobaron la existencia de las armas y que Aranda no tenía la documentación que habilite a la tenencia de las mismas, por lo que dieron intervención a Flagrancia por el delito de tenencia ilegal de arma de fuego de uso civil por el que hoy fue condenado.

El nombre del exempresario apareció en los medios en diciembre del 2012, cuando confesó y fue condenado a 3 años y 3 meses de cárcel por intentar robar y manosear a una mujer de 53 años a la que, el 19 de noviembre de 2009, encañonó con una pistola 9 mm en su casa del barrio Chacabuco, en Desamparados, Capital.

José Armando Aranda en otro de sus pasos por Tribunales, en 2013.

Mientras que en 2013 le dieron 14 años de cárcel por amenazar con una pistola y un cuchillo a una chica para obligarla a que le practicara sexo oral y, luego, robarle el teléfono móvil, a plena luz del día en Rawson.

Fuentes policiales dijeron que Aranda estaba alojado en su domicilio y monitoreado con un dispositivo electrónico. Además de él, los otros sospechosos de integrar la red narco son tres mujeres, un penitenciario, el taxista y un reo del Servicio Penitenciario. Solamente de este último trascendió la identidad: Rodolfo Carrizo, quien cumple una condena por robo agravado.