Un hombre y su hijo, ambos de apellido Ávila, fueron detenidos ayer por policías de Seguridad Personal al mando del subcomisario Gregorio Díaz, sospechados de encubrimiento. A ambos les atribuyen haber comprado los 10.000 kilos de pasas que una banda de 8 encapuchados robó con otras cosas a punta de arma de la firma ‘Cassab Ahun’ en una finca de 25 de Mayo luego de reducir al casero y a su señora el último domingo a las 2 de la madrugada, indicaron fuentes policiales. Un día después del robo, unos 4.000 kilos de pasas habían sido secuestrados por los pesquisas en un galpón de la calle Paraná, unos 200 metros al Este de Tucumán, en la Villa Storni, Capital. Fue así porque en principio el denunciante sólo precisó una de las dos variedades del fruto disecado que le habían llevado. Al ampliar su denuncia, incluyó la otra variedad sustraída y ayer fueron al mismo lugar y recuperaron todas las pasas robadas, indicaron en la Policía.