Una redada para controlar los disturbios provocados por un grupo de jóvenes en el barrio Laprida, Chimbas, terminó con la detención de 8 jóvenes, aunque la mayoría de ellos pudo volver a sus casas luego de quedar ligados a una falta. El único que quedó preso fue un joven de apellido Escudero, que tenía pedido de captura y es investigado por varios robos, dijeron fuentes policiales.