Dos hermanas de 8 y 7 años se llevaron la peor parte de una pelea entre sus padres, ya separados. La mayor recibió al menos tres puntazos en una de sus piernas y la menor un corte de unos 7 centímetros en uno de sus glúteos. Un tercer hermano, de 3 años, también resultó golpeado, dijeron ayer diferentes fuentes policiales.
Lo que no está claro es quien propinó semejante castigo a las criaturas. La hipótesis inicial manejada por la Policía, apuntaba como autor del ataque al padre, un exconvicto con antecedentes por delitos contra la propiedad de apellido Páez. Sin embargo otra teoría de la investigación incluye a la madre, de apellido Villarroel, embarazada de 7 meses, como posible autora.
Luego de que los chicos terminaran en el hospital Guillermo Rawson, se decidió que las nenas quedasen internadas a causa de los tajos que les impedían caminar, dijeron los voceros. En el caso ya toma intervención la Dirección de Protección a la Niñez, agregaron.
Tras el ingreso de los niños, su madre denunció a Páez por lesionarlos en un confuso episodio (habría aludido a una suerte de accidente) y de atacarla a ella, más de una vez. Por eso fue que sobre el mediodía, uniformados de la Seccional 2da buscaron y encontraron a Páez en el barrio Costa Canal III, Capital, lugar en el que lo apresaron no sin pagar el costo: el sujeto les rompió de un ladrillazo el parabrisas del patrullero, dijeron.
Informalmente Páez negó cualquier relación con el hecho.
La otra teoría a confirmar o descartar era más compleja e incluía a la propia madre, también con entradas en la Policía. Según ese relato, todo habría comenzado el viernes al mediodía en la casa del barrio Echeverría, Capital, donde vive la joven con sus hijos. Hasta allí habría llegado el sospechoso y habría golpeado a la mujer ya que, al parecer, se resiste a que esté embarazada de otro, indicaron.
Y una hipótesis es que la joven, descontrolada por esa agresión, habría resuelto tomar venganza contra su ex atacando a sus propios hijos el mismo viernes en la tarde.
Esta última sospecha se reforzaba en el testimonio informal de algunos vecinos que habrían referido haber visto a la joven golpear a sus hijos. Y también en el testimonio informal de las nenas, que habrían señalado a su madre como la agresora.
De todos modos, los pesquisas dirigidos por el juez de Instrucción Maximiliano Blejman, esperan contar con otras pruebas y la versión de las nenas en Cámara Gesell para que el magistrado decida si ella debe o no terminar en un calabozo.
