Una estafa con ribetes insólitos ocurrió la semana pasada en San Juan. Una joven, que prefirió no revelar su identidad, pensó que había dejado la tarjeta de crédito en su casa, pero en realidad la había extraviado en la vía pública. ¿Cómo se dio cuenta? Porque el miércoles le llegó al mail un correo de Visa Home en el que la felicitaban por una compra exitosa, realizada cinco minutos antes. 

Automáticamente notó que la había extraviado. Alertada por la situación, llamó por teléfono a Visa para denunciar la pérdida. De inmediato le llegaron dos mensajes más con nuevas compras. En total fueron tres por $15 mil pesos. 

Junto a su marido se dirigieron hasta la comisaría para realizar la denuncia. Al día siguiente se trasladaron hasta los locales involucrados para pedir los comprobantes y demostrar que la firma en el ticket nada tenía que ver con la de la titular de la tarjeta. En uno de ellos les juraron que la mujer que realizó las compras había presentado el DNI, mientras que en los otros dos les pidieron disculpas por no haber pedido el documento, como corresponde. 

La sorpresa llegó el viernes, cuando desde la policía los llamaron para informarles que habían detenido a un hombre. Insólitamente, el sujeto llegó hasta el local comercial para cambiar la ropa que habían comprado. Al momento de ser aprehendido, juró que se la habían regalado y que no sabía nada de la estaba. Sin embargo, quedó detenido porque nunca quiso decir el nombre de la mujer que se la entregó.  

En las últimas horas, el abogado de la mujer acusada de estafa, de la que aún no trasciende el nombre, aseguró que entre hoy y mañana se presentará en el Juzgado.

Desde Visa le aseguraron a la pareja que si se comprueba que ellos no realizaron las compras, no deberán abonar ni un peso.