Preventiva por homicidio doblemente agravado y embargo de 1 millón.

La categórica conclusión de Bomberos sobre el hecho de que el incendio fue intencional, causado con un combustible volátil como el alcohol etílico, encendido con fósforos o un encendedor. Los informes de los médicos que atendieron con vida a Liliana Loyola (64 años, jubilada judicial) y los que analizaron su cuerpo una vez fallecida, con su opinión de que por la gran superficie de cuerpo afectada (un 40%) y la localización de las lesiones (cuello, pecho abdomen, brazos, parte de sus piernas), no era posible hablar de accidente, más aún porque la mujer no tenía sus manos quemadas, lo lógico cuando alguien quiere evitar quemarse. Y los testigos, los que vieron a su hijo adoptivo Juan Eduardo Echegaray (27) en el momento en el que ocurrió el incendio, y los que escucharon o presenciaron, más de una vez, cuando el joven la insultaba, golpeaba puertas o paredes o la amenaza, a veces de muerte, cuando ella no le daba plata.


Esas pruebas sobresalieron en la decisión del juez Martín Heredia Zaldo a la hora de procesar con prisión preventiva a Echegaray, por homicidio agravado por el vínculo y por violencia de género, trabándole además un embargo de 1 millón de pesos, dijeron fuentes judiciales.

Esa resolución tomó el juez Martín Heredia Zaldo contra Juan Eduardo Echegaray por el crimen de su madre Liliana Loyola.


Con esas evidencias el magistrado dio por acreditado que aquel 29 de noviembre pasado en la casa de la víctima en el barrio Aramburu, Rivadavia, entre las 20 y las 21, Echegaray roció alcohol a su madre tras una discusión (al parecer porque no le daba dinero) y le prendió fuego, para luego simular que quiso salvarla llevándola hasta la ducha.


En su descargo, Echegaray dijo que llegó justo cuando ella se quemaba. Que ella le habló de un accidente con una vela y alcohol, que él supuso en gel. Y que la llevó a la ducha para ayudarla.
Sin embargo un vecino aseguró que lo vio en la casa de la víctima alrededor de una hora y que escuchó al menos una discusión.


A su vez, los bomberos dijeron que por el patrón descripto por las llamas, no fue accidente pues eso implicaría que las velas y lo que estaba cerca se hubiera quemado y eso no ocurrió. El 11 de diciembre la mujer le dijo a un hermano que en realidad su hijo la había quemado viva. El 9 de enero perdió la vida y ahora todo complica a Echegaray.