La primera. Angel Nahuel Flores (derecha) recibió ayer en Flagrancia el primer castigo de los múltiples antecedentes que registra, incluso el más grave, haber matado a un bebé.

 

Angel Nahuel Flores (21) fue condenado ayer por el juez de Flagrancia Ricardo Moine a 1 año de prisión efectiva, por intentar robar herramientas de mano de la escuela EPET Nº4 en Ignacio de la Roza y Catamarca, Capital, alrededor de la 1 del último jueves. Así, el joven recibió su primera condena.

El castigo impuesto a Flores fue el mismo que aceptó recibir, luego de acordar un juicio abreviado a través de su defensor oficial Alejandro Martín García, con el fiscal Ignacio Achem.

La otra causa que tiene pendiente este joven es por un caso resonante: el crimen del pequeño Yutiel Castro, que tenía 1 año y 7 meses cuando no sobrevivió a la última de las palizas que recibía. Un letal golpe en su abdomen, que le destruyó su hígado y le causó una hemorragia de la que no se recuperó: murió el 8 de mayo de 2014.

Esa vez, el niño estaba a cardo de Angel Nahuel Flores y su hermano Jonathan Alberto (29) en una expanadería que usurpaban en Capital, pues su madre (muerta luego en un accidente) había salido a prostituirse. La joven era por entonces pareja de Nahuel.

El mayor de los Flores fue condenado a perpetua por ese aberrante crimen y Nahuel fue declarado responsable porque tenía 17 años y para la ley era menor. La Corte ya confirmó el fallo contra los hermanos Flores, pero la Justicia de Menores aún no resuelve cuál será su destino en ese caso, es decir si lo condenará como un mayor, con una pena atenuada por el delito en grado de tentativa o si lo absolverá.