La Justicia dictaminó que Jonathan Luna engañó y mató a Micaela Ortega para ocultar otros delitos como el acoso tecnológico y el robo.

Se trata del primer caso de grooming que culmina con el crimen. Además, consideró el agravante de que se trató de un femicidio por lo que dictaminó la prisión perpetua.

En la madrugada del 23 de abril de 2016 Micaela se despertó y le dijo a su mamá que la amaba y desapareció. Al otro día la mujer se fue a trabajar y luego llamó a la abuela de Micaela para que la despierte. En ese momento se dieron cuenta que la nena había dejado un muñeco en el lugar dentro de la cama.

Se había ido con Jonathan Luna quien la había engañado desde hacía varios días atrás a través de las redes sociales.

Cinco días después su cuerpo golpeado y estrangulado fue hallado cerca de la ruta nacional 3, a la altura de Ingeniero White.