Una pareja de policías fue procesada por estafa en una causa en la que están acusados de efectuar compras con tarjetas de crédito robadas. El juez Leopoldo Zavalla Pringles -que investiga el caso desde el año pasado- no pudo comprobar el delito de robo, pero sí dio por acreditado que esos efectivos policiales utilizaron los plásticos en algunos comercios y adquirieron artefactos y ropa por un monto aproximado de 4.000 pesos, a nombre de su verdadero titular.

La resolución del Primer Juzgado de Instrucción recayó contra el oficial inspector Pablo Quiroga, quien actualmente estaría desempeñándose en la Seccional 2da., y la agente Vanesa Flores, que trabajaba en la Seccional 26ta. y luego fue suspendida en sus funciones, indicaron fuentes judiciales y policiales. Esta mujer policía había estado involucrada en otra causa penal por robo de encomiendas en el Correo Argentino en el 2006.

Ambos fueron notificados del procesamiento en estos días y Quiroga, a través del abogado Juan Carlos Turón, ya apeló la resolución. Allegados a la defensa indicaron que ellos sostienen que no hay pruebas para acusarlo.

Quiroga y Flores fueron detenidos el sábado 14 de marzo del 2009. Y todo vino por la denuncia de un hombre de apellido Gómez, que aseguró que le robaron su billetera y luego descubrió que alguien había hecho compras con sus tarjetas de crédito.

No se conoció el contenido del auto de procesamiento, pero por lo que se dijo en su momento Gómez denunció que el 28 de febrero de ese año fue a almorzar con su familia al Hiper Libertad. Pasado un rato notó que le faltaba su billetera. De acuerdo a fuentes allegadas al caso, en aquel entonces dijo que hizo una exposición por extravío en la Seccional 27ma. Al día siguiente se comunicó con una firma comercial para anular su tarjeta y fue ahí que se enteró que habían realizado compras en las últimas horas. Lo mismo pasó cuando pidió el informe por otra de sus tarjetas. El caso fue a parar a manos de los policías de la sección Robos y Hurtos de la Brigada, que a través de un pedido de informe establecieron que el mismo 28 de febrero se concretaron compras de ropa y electrodomésticos a nombre de Gómez. De acuerdo a lo que revelaron aquella vez en la policía, en Falabella hubo dos compras por 649 y 492 pesos, en Planet.com por 810 pesos, en Heben 160 pesos, en Scombro 420 pesos, en Tiza 438 pesos y en Garbarino por alrededor 1.000.

Una persona que trabajaba en uno de esos negocios habría reconocido al oficial Quiroga y a la agente Flores como los clientes que hicieron una de las compras. Hasta se habló de que existían filmaciones en donde se veía a ambos haciendo las transacciones, pero esto no fue confirmado en tribunales. Los pesquisas de Robos y Hurtos de la Brigada apuntaron las sospechas contra los dos policías y el juez ordenó los allanamientos. En la casa de Flores -en donde prácticamente vivía Quiroga-, hallaron artefactos nuevos, ropa y tickets de las supuestas compras, según fuentes judiciales. Queda claro que el juez Zavalla Pringles llegó a la conclusión que el oficial y la agente incurrieron en una presunta estafa, pero no pudo comprobar que ellos hayan sustraído las tarjetas.