El esfuerzo de ahorrar durante unos 15 años quedó en la nada para una docente, su hermano y su padre quienes se ausentaron 90 minutos el último lunes de su vivienda en Rivadavia. En ese lapso, malvivientes ingresaron por el fondo de la casa, violentaron dos accesos y revisaron todas las habitaciones en busca de objetos de valor. Algunas alhajas, un televisor LCD de 32 pulgadas y una notebook fueron los objetos que tomaron. Pero eso no fue todo, porque además se alzaron con un botín en plata de casi 200.000 pesos: 20.000 dólares (unos 166.800 pesos al cambio oficial de ayer) y otros 30.000 pesos que estaban ocultos en un mueble, precisó Laura García, una de las damnificadas.

García explicó que el último lunes a las 20.30 salió a pasear con su padre y su hermano, que es electricista. En la casa que habitan en calle Ituzaingó, en el barrio Gendarmería, Rivadavia, no quedó nadie. A las 22, la familia regresó y se toparon con la primera señal de que algo no estaba bien: el portón del frente estaba abierto y las luces de la vivienda estaban encendidas.

Al ingresar, la familia encontró el comedor y tres habitaciones revueltas. Todo indica que los malvivientes sabían que en la casa no había nadie e ingresaron por el fondo. En ese sector, violentaron dos gruesos barrotes de una ventana y la cerradura de una puerta reja que da a la cocina, comentó la docente, quien agregó que a pesar de que sus vecinos estaban no detectaron la presencia de los ladrones.

De las habitaciones sustrajeron el televisor, la notebook, algunas alhajas y el dinero que estaba oculto en un mueble. ‘Es la primera vez que nos roban. Los dólares y pesos que teníamos eran el fruto del ahorro de 15 años, por cualquier eventualidad, y eran de mi papá, mi hermano y míos. Seguro que los ladrones sabían nuestros movimientos’, especuló García.