Eligieron justo un día de cobro de las cuotas, entraron en el momento en que un padre abría la puerta desde adentro e, incluso, tuvieron la previsión de actuar quince minutos antes que llegara el policía de adicional. Así de planeado fue el atraco perpetrado ayer por dos delincuentes que irrumpieron armados con revólveres a las oficinas del Colegio Parroquial Nuestra Señora de Andacollo, en Chimbas, y se alzaron con 18.000 pesos después de amenazar a dos empleados.

El atraco duró sólo 2 minutos y tuvo como escenario la oficina del colegio, que funciona en calle Mendoza al 1640 Norte, casi esquina Rodríguez, a metros de la plaza departamental y a una cuadra de la comisaría. Los delincuentes tenían todo calculado porque entraron a las 17.45, un rato antes que llegara la custodia policial. Y lo hicieron en el instante que un padre abrió la puerta (que tiene traba) desde adentro para salir y ahí aprovecharon para colarse. Ese papá se marchó sin sospechar nada. Los sujetos entraron disimuladamente, pero cuando llegaron al mostrador sacaron sus revólveres y uno de ellos apuntó a Gustavo Sánchez, el cobrador, a través de la abertura en el vidrio. Es que ese sector permanece cerrado por seguridad. El otro asaltante intentó romper la puerta, pero no lo logró.

‘El ladrón que me apuntaba a mí, dijo: dame todo, o te quemo. Llevaba un revólver calibre 38 largo. Atrás de mí estaba la chica que hace la limpieza, que se quedó tiritando. Yo empecé a darle el sencillo, pero me exigió que le dé los billetes más grandes. Después me pidió ‘los morados’ y ahí tuve que sacar todo el cajón para darle lo que teníamos’, relató el empleado.

Según confirmaron, hasta esa hora habían recaudado 18.000 pesos. ‘Estos meses anduvimos mal con el cobro de las cuotas, pero hoy (por ayer) a la siesta vino mucha gente a pagar porque están por entregar la libreta de los alumnos. Por eso había más de plata’, explicó uno de los encargados. Sánchez señaló que los delincuentes cometieron el atraco en 2 minutos y salieron a la calle. ‘Cuando salí por detrás, iban escapando en una moto 110cc hacia el Norte’, comentó. Los sujetos tendrían alrededor 30 años. Uno vestía camisa y llevaba lentes; el otro entró cubriéndose el rostro con una cuellera, describieron.