El abuelo. Carmen Garro señala el lugar donde abrieron el hueco. Por seguridad tuvo que tapar el boquete, aunque sea de forma provisoria.

Un ladrón rompió el techo de la cocina comedor de una precaria vivienda de Santa Lucía y se llevó un televisor y parte del dinero de un préstamo de un jubilado. El robo se produjo en la madrugada cuando el dueño de casa dormía en su habitación.

"Seguro sabían que yo estaba solo en la casa. Estos muchachitos siempre vienen a pedir prestado plata cuando lo necesitan y nunca les he negado nada. Y mi miren lo que me hacen", se lamentaba Carmen Garro (78), quien sospecha que los autores del robo son jóvenes de la misma Villa Bermejito, en Santa Lucía. El abuelo vive con sus hijos y nietos en una vieja casona de adobe en la calle Chacabuco.

Dio la casualidad que este último fin de semana los hijos y los nietos de Garro viajaron a Jáchal por una fiesta familiar y entonces el jubilado se quedó solo. A la noche, cuando se fue a dormir a su habitación, cerró con candado la puerta de la cocina comedor. Él dice que no escuchó nada. Lo cierto es que en la madrugada, alguien trepó arriba de la casa y con algún elemento rompió y abrió un boquete en el techo de cañas, palos y barro. Por ese hueco se colaron al interior de la cocina.

El o los ladrones tomaron el televisor 32 pulgadas y al levantarlo encontraron los 7.000 pesos que el abuelo tenía escondido debajo del aparato. Eso fue suficiente para que después huyeran con el TV y el dinero por el mismo hueco. Garro descubrió el hecho en la mañana cuando fue a prepararse el desayuno y se topó con el agujero en el techo. El dinero era parte de un préstamo, dijo.