Dos jóvenes fallecidos y cinco heridos en un espectacular choque múltiple que terminó en vuelco. Ese fue el saldo que quedó ayer tras dos violentos accidentes ocurridos en una de las rutas más peligrosas de la provincia: la ruta 20. En Caucete, de madrugada, dos amigos que viajaban en una moto, se estrellaron contra un árbol y perdieron la vida en el acto. En 9 de Julio, un auto desencadenó una colisión múltiple con otros automovilistas y el vuelco de una ambulancia que trasladaba a un paciente. (ver página 19)
DOS AMIGOS
Alejandro Antonio Miranda (22 años, el menor de 8 hermanos) y Maximiliano Hernán Moreira (23 años, el quinto de 7 hermanos) eran amigos de toda la vida, solteros y trabajaban como jornaleros. Cursaron la escuela juntos, vivían en el mismo barrio, el Pie de Palo de San Martín, y cuando salían a disfrutar su juventud, tampoco se separaban. Y encima compartían la misma pasión: el fútbol.
Alejandro era fanático del Club San Martín de su departamento y lo seguía a todos lados, contó acongojado Marcelo, su padre, quien agregó que a su hijo le gustaba andar en su moto "fuerte".
Maximiliano jugaba de lateral izquierdo en el Club Sportivo del Carril, con el cual salió campeón en 2010 por la liga caucetera de fútbol y acérrimo adversario del equipo de su amigo, comentó Diego Moreira, uno de sus hermanos, quebrado.
Ayer, alrededor de las 8, un llamado anónimo al 911 alertó que los dos amigos estaban sin vida dentro de un canal de riego ubicado a un costado de la ruta 20, unos 500 m. al Este de calle La Plata, Caucete.
Cuando la policía llegó allí, se topó con una moto Motomel 200cc. con el frente y la rueda delantera destrozados en un descampado. Y al lado de la ruta, los cuerpos de los dos muchachos sin documentos, encimados y con un casco destrozado en una profunda acequia.
Lo que pudieron reconstruir los pesquisas de la comisaría 9na. es que Miranda guiaba su moto al Oeste a elevada velocidad por la banquina de la ruta 20 acompañado por su amigo. Aparentemente, ambos fueron a ver en la tarde un partido entre San Martín y El Ombú, por la liga caucetera de fútbol, y se quedaron con otros amigos en aquel departamento, señalaron las fuentes.
La policía investigaba si el conductor de la moto viajaba ebrio y si ese fue el motivo por el que chocó.

