San Juan, 11 de marzo.- Roberto Rosso, Gerente del Banco de la Nación Argentina, la institución más afectada el año pasado, explicó al DIARIO DE CUYO online que “hemos reforzado los dispositivos de seguridad y aún nos falta terminar. Vamos a colocar más cámaras, pero esto no es suficiente”. Consideró que “la gente tiene que comprender que ella también debe colaborar”. “Peleamos mucho con el tema de los celulares. Hay clientes que no quieren dejar de usarlo dentro del banco, y esto es una falla en la seguridad grave. A veces hemos tenido que recurrir a la ayuda de la policía para resolver un caso de estos”.

Eduardo Daniel Estrada, Gerente responsable de la Plataforma Comercial de la sucursal, apunta también sobre las responsabilidades de los clientes: “Las personas deben cambiar un poco sus costumbres y sus hábitos. No hacer siempre el mismo recorrido, o a la misma hora, si no serán presa fácil de la inteligencia que puertas afuera hagan los delincuentes, y esto nos excede”.

“Por el banco están circulando más de 4000 personas por día”, señala Estrada. “La tarea de prevención no es sencilla, aunque por los resultados que hemos observado, estamos muy satisfechos”.

Rosso no esquiva el tema más candente. La supuesta presencia de “entregadores” es una idea que está muy instalada en la opinión pública. “Si bien conocemos profundamente a nuestro personal, estamos en la obligación de investigar todas las posibilidades, incluso ésta, la de la presencia de cómplices de los malvivientes dentro del personal bancario. Lo hemos hecho y podemos decir con orgullo que nunca se ha comprobado una acción semejante de ninguno de nuestros empleados”, concluyó.