Una familia se ausentó ayer 4 horas de su vivienda y en ese tiempo, al menos dos ladrones aprovecharon para robarles hasta un auto. Los damnificados salieron a hacer unos trámites y allí los malvivientes rompieron un acceso del fondo, tomaron varios aparatos, unos 10.000 pesos y encima se llevaron un Fiat Uno que, hasta el cierre de esta edición, no era localizado por la Policía.

El ataque ocurrió en una vivienda de calle Las Heras, entre Arenales y Pedro de Valdivia, en la Villa del Carril, Capital. Allí vive Alfredo Quiroga, una hermana de 72 años y otros parientes. Ayer a las 9 todos salieron a hacer trámites. En ese tiempo, delincuentes entraron por el fondo de la casa y llegaron hasta una puerta que da a un comedor. “La casa tiene alarma, pero mi hermana salió y se olvidó de activarla. También se confió y no cerró una puerta reja que tiene el comedor”, comentó el hombre, resignado.

Lo concreto es que esos dos descuidos fueron aprovechados por los ladrones, quienes rompieron a patadas la parte baja de la puerta de madera del comedor. Lo llamativo es que un vecino que vive al lado estaba al momento del robo, pero aparentemente no escuchó el ruido que hicieron los desconocidos.

Una vez dentro, los sospechosos revisaron toda la casa y sustrajeron una cafetera, una juguera, otros aparatos pequeños y 10.000 pesos que la familia había ahorrado para hacer un viaje en unos meses. Por si fuera poco, encontraron las llaves del Fiat Uno (de color blanco, patente BLM-998) que tenían estacionado en el garaje, cargaron el botín y huyeron en el vehículo. El escape fue observado por una vecina que barría la calle, pero le restó importancia porque pensó que eran conocidos de la familia, explicó Riofrío.

Alrededor de las 13, los dueños de casa regresaron a su hogar y se toparon con el faltante del auto y el resto de sus pertenencias. De inmediato dieron aviso a la Policía y hasta anoche el rodado no había podido ser localizado por los uniformados de la Seccional 28va, informaron fuentes policiales.

“Hace 3 meses le robaron a una vecina que se había mudado hace poco y ahora a nosotros. Esta cuadra es tierra de nadie en la noche y ojalá que la Policía pueda encontrar el auto”, comentó Alfredo Quiroga.