El asesinato de Kevin Alexander Borquez (9), ocurrido el pasado 3 de mayo en el barrio Villa Paula, Chimbas -el menor murió al recibir un balazo en la cabeza cuando pretendía alejarse de una pelea vecinal- desató una serie de hechos de violencia. Enfurecidos por el crimen, los vecinos de ese barrio saquearon y quemaron dos casas: la del muchacho que originó esa pelea y luego, la vivienda donde supuestamente convivía la presunta homicida, Yolanda Godoy (24) y su pareja, Gerardo Riveros (25), ambos aún detenidos. Ante la violencia y los reclamos vecinales por seguridad, el Gobierno decidió instalar próximamente una base motorizada en la segunda vivienda incendiada. Pero esa decisión trajo otro problema: desde el día del crimen, Gisela Gutiérrez (23), la ex pareja de Riveros, padre de sus dos hijos y embarazada de una nena, se quedó sin casa y se tuvo que ir a vivir a una pieza de adobe de Capital. Y ahora, reclama que el gobierno "me de otra vivienda. Un lugar digno para vivir y criar a mis hijos".

Desde agosto último, Gutiérrez abandonó, con sus hijos -de 8 y 6 años- la casa que le otorgó el IPV y de la cual era copropietaria con Riveros en la manzana D del barrio Villa Paula, Chimbas. "Me fui porque me pegaba y porque sospechaba que él me engañaba con Godoy. Hice abandono de hogar y realicé la exposición en la policía", contó la joven, dolida.

Desde aquel día, se trasladó con un ropero y con unas pocas prendas a una humilde pieza de adobe de 6 por 3 metros que le prestó una vecina de su mamá en callejón Echegaray, Capital. Pero el saqueo y el posterior incendio de su antigua casa, agravó su situación. La joven y sus hijos se quedaron sin ropa, sin electrodomésticos, sin Riveros, quien traía casi todos los fines de semana mercadería y algo de plata. Y lo principal, sin su hogar, comentó la chica.

"Cobro $340 de la Asignación Universal y sólo me quedan $120, porque estoy pagando las 2 camas que tengo ahora. No me quedó nada y casi todas las cosas que tengo ahora, son prestadas. Agradezco a la gente de la Dirección de la Niñez, Adolescencia y Familia que nos ayudaron. Me quitaron mi casa y me quedé sin hogar. Lo único que pido es que me den otra casa donde vivir dignamente", señaló Gutiérrez.

Este diario intentó durante varios días tener una declaración del interventor del IPV, Vicente Marrelli, y del secretario de Obras y Servicios Públicos, Carlos Gil, pero fue imposible obtener una respuesta de los funcionarios.