Un hombre que transitaba en bicicleta por un tramo no habilitado de la Ruta Nacional 40, en el departamento Chimbas, perdió la vida al caer de la bicicleta que guiaba el sábado en la noche. Según fuentes policiales, la infortunada víctima no habría percibido un abrupto desnivel de unos 50 centímetros en el asfalto que se construye y no tuvo ninguna chance porque cayó de cabeza.

El hecho trascendió ayer pero se conoció en la Policía cerca de las 21 del sábado. La víctima fue identificada como Miguel Páez, de 59 años y oriundo de Chimbas.

Hasta lo que pudo reconstruir la Policía, Páez transitaba hacia el Sur por la Ruta 40, pero al llegar a la altura del cruce con Centenario, perdió el control por un desnivel y no tuvo ninguna chance.

En principio se sospechó que algo más grave pudo haberle ocurrido, porque Páez presentaba la cabeza literalmente destrozada.

Pero luego policías de la seccional 17ma. y peritos de Criminalística analizaron la escena del hecho con detenimiento y no notaron nada extraño que los hiciera sospechar de algún ataque, pues Páez aún tenía todas sus pertenencias, como su celular. A la luz de esta evidencia la hipótesis de una caída a causa del desnivel les resultó más que evidente.

De todos modos esperaban contar con el resultado de la autopsia para poder establecer con precisión si se trató o no de un accidente, pues no dejaba de llamarles la atención la grave lesión en la cabeza.

> Un nene de 3 años murió intoxicado
 

Un nene de 3 años perdió la vida alrededor de las 2,30 de ayer en el Hospital Guillermo Rawson, donde había sido derivado luego de sufrir un grave accidente doméstico, pues consumió un líquido de limpieza para neumáticos. La víctima fue Sebastián Farías quien vivía con su madre de 21 años y otros familiares en la Villa Libertad, en calle San Martín, entre Aberastain y David Chávez, en Pocito, dijeron fuentes del caso. El hecho ocurrió alrededor de las 20 del sábado, pero tan tóxica resultó la ingesta para el menor que los esfuerzos médicos para salvarlo resultaron vanos. Un juez debe resolver si cabe o no atribuir alguna responsabilidad a los encargados de cuidar al menor.