El tatuador sanjuanino Patricio Pioli fue condenado ayer en La Rioja a 5 años de cárcel por haber ejercido violencia de género contra su expareja (lesiones leves calificadas) y haberla coaccionado con la difusión de imágenes de sexo (finalmente lo hizo), delito popularmente conocido como "sextorsión". Pioli fue denunciado por Paula Sánchez Frega tras finalizar su relación en 2016. La joven ayer se mostró conforme y consideró el fallo como "ejemplar". "Ahora voy a seguir luchando para que salga la ley (el proyecto para endurecer castigos en estos casos tiene media sanción en el Senado). Estoy bastante conmovida y la verdad que mientras siga libre no me voy a sentir segura", dijo.