El martes pasado, Aldo Francisco Quiroga decidió no darles más vueltas al asunto y a través de su defensor oficial Carlos Reiloba, firmó un acuerdo de juicio abreviado con la fiscal Marcela Torres, en el que admitió haber sido uno de los 7 involucrados en el ataque a puntazos que terminó con los días de un preso de un grupo rival, Andrés Alejandro Rosselot (26), la noche del 11 de octubre de 2019.

Aquella desigual pelea fue por problemas de dominio en el Pabellón 5 del Penal de Chimbas.

Ante el juez de la Sala I de la Cámara Penal, Juan Carlos Caballero Vidal (h), Quiroga aceptó también cumplir 9 años de cárcel. Los demás implicados no quisieron firmar ese acuerdo y se suponía que ayer empezarían a intentar desligarse en un juicio ordinario. Pero dieron un giro a esa posición, firmaron un abreviado y así también se mostraron dispuestos a recibir 9 años de cárcel por homicidio simple.

Esos imputados son cinco integrantes de la familia Reyes Díaz. Néstor "Púa" Reyes, Mauro Javier Díaz y Ramón Exequiel Díaz. Y los hermanos Rolando y Claudio Díaz, que cumplían perpetua (igual que otros cinco sujetos) por el crimen de la beba de 3 meses Uma Calvo, muerta a causa de un tiro en la cabeza durante una balacera a su casa en Pocito, el 5 de enero de 2014. A ellos, sumó su firma en el juicio abreviado Cristian Daniel Fuentes.

Rosselot, la víctima, también cumplía prisión perpetua porque fue uno de los cuatro homicidas del finquero Néstor Moreno (52), ultimado a cuchillazos, hachazos y palazos la noche del 13 de marzo de 2013, en Pedernal, Sarmiento.

Ahora, el juez debe resolver.