Hasta balas tenía el sujeto señalado por prostituir a su propia sobrina y usarla de anzuelo para captar a otras menores. El juez Diego Sánz dispuso que esa menor de 15 años ya no permanezca con su familia. Ahora está alojada en un hogar estatal.

La investigación para determinar si es cierto que un sujeto prostituía a su sobrina de 15 años y la usaba para captar a otras menores con la idea de explotarlas también sexualmente, ya tiene otros tres detenidos.

El último viernes, policías de la Brigada de Investigaciones Este los apresaron y secuestraron evidencia clave para confirmar esa sospecha, dijeron fuentes policiales y judiciales. Como había anticipado en exclusiva este diario, el sábado de la semana pasada el juez subrogante en el Quinto Juzgado de Instrucción, Diego Sánz, había ordenado a los mismos pesquisas detener al supuesto proxeneta, luego de que una chica de 16 años, amiga de su sobrina de 15, denunciara que días atrás, en noviembre, esa menor la había sacado de su casa una noche, engañada con el convite a una fiesta de bautismo. Engañada, porque en lugar de un bautismo partieron de Caucete hasta una finca de Ullum, donde las esperaban una docena de sujetos dispuestos a pagar por sexo, precisaron los voceros.

Esa vez, en Cámara Gesell, la chica contó que ya desde el momento en que se subieron a una combi, el tío de su amiga comenzó a insinuársele, a manosearla y a preguntarle directamente cuánto cobraba por sus servicios sexuales.

Cuando llegó a la "fiesta", otros sujetos comenzaron también a intentar lograr un "pase" con ella (se hablaba de $700), pero ella se resistió y esa noche conoció a un joven que "la salvó", porque se dio cuenta de lo que pasaba, la apartó y evitó situaciones peores, indicaron.

Luego de la denuncia, el tío de la menor señalada como prostituta quedó detenido y en su casa encontraron 16 cartuchos de escopeta y 22 de otros calibres.

En el curso de esta semana, declaró también en el Anivi la sobrina de ese sujeto. Y si bien se cuidó de involucrar a su tío y negar que hubiera tenido sexo a cambio de dinero, admitió el encuentro con la otra chica, confirmó el viaje a Ullum y dio otras pistas que permitieron involucrar a los otros tres sospechosos, entre los que está el supuesto chofer de la combi en la que ambas menores fueron trasladadas hasta Ullum.

Los investigadores creen que puede haber más involucrados y más víctimas.