La Defensa Oficial de un caucetero sospechado de intentar matar a su pareja el 11 de junio pasado en medio de una discusión cosechó ayer, por tercera vez, un revés en su intención de que sea liberado y espere el desenlace del proceso (el juicio) con un dispositivo electrónico para evitar que se acerque a la víctima, trabajando en una finca de 25 de Mayo para ayudar al sostén de los dos hijos que tiene con esa mujer de 32 años. El argumento de Mariela Ordoñez (ayudante en la Defensoría Oficial de Alejandro Martín García) fue que los problemas neurológicos que hasta ahora le impiden a esa mujer dar su versión (el día del hecho sufrió un fuerte golpe en su cabeza) es que los problemas neurológicos que sufre no pueden atribuirse exclusivamente al hecho que involucra a su defendido, Jonathan Torres (25), porque ella registra antecedentes de autoagresión y violencia contra otras personas, como sus propios hijos. Y que no se puede dilatar en el tiempo el encierro de su defendido, por la indeterminación del momento en que podrá declarar la víctima.

Por ahora, los médicos diagnosticaron que no puede declarar porque sufre afasia, una alteración en el lenguaje (no puede expresarse bien) por un daño cerebral. Pero aún no pueden determinar cuál es la real dimensión y gravedad de su lesión cerebral.

Al contestar el planteo defensivo, el fiscal de Impugnación, Fabrizio Médici, reprochó la falta de perspectiva de género de la Defensa ya que -argumentó- la víctima no puede declarar precisamente por "la feroz golpiza" que recibió aquella madrugada. También recordó que aquel día, una hermana y la madre del imputado trataron de desviar la pesquisa para favorecer a su pariente. Así, dijo que la hermana aseguró que no vio nada y que la madre habló primero de que su nuera se descompensó, y luego intentó instalar la idea de que habían ingresado ladrones y la habían golpeado.

Ambos testimonios, sin embargo, fueron desbaratados por las declaraciones de dos pequeños sobrinos (de 8 y 5 años) del imputado. El varón declaró en Cámara Gesell que vio a su tío pegarle una patada a su tía y la nena aseguró que esa vez su mamá la levantó de apuro para que se fueran, diciéndole que su hermano había atacado a la mujer, recordó el fiscal.

El juez rechazó por tercera vez el pedido de la Defensa con el argumento de que Torres, en libertad, puede entorpecer la investigación. También le recomendó a Fiscalía hacer todo lo posible para definir si la víctima puede o no declarar, con la idea de empezar a concluir la investigación.