"Agradezco a Dios que está vivo mi viejo", es lo primero que dice la joven, identificada con las iniciales A.H., de 18 años, que pidió reserva de su identidad y la de sus padres, por temor.

Esta madrugada ella, su padre y su madre fueron víctimas de un violento asalto en la casa de Chimbas donde viven hace apenas 3 meses, en una finca ubicada en el callejón Muñoz, cerca de Buenaventura Luna.

Según su relato, a eso de las 5.45 su padre salió al fondo porque escuchó ruidos y porque los perros no paraban de ladrar. En ese momento descubrió que desconocidos habían andando por el lugar y que se habían llevado algunas cosas, como la manguera.

El hombre (A.G.H., de 54 años) llamó al 911 y al rato llegó al lugar un patrullero. La chica relató que los policías le tomaron los datos, le dijeron que iban a dar una vuelta por la zona y partieron.

La familia en ese momento no sabía que lo peor estaba por llegar. "Como a los 10 minutos mi papá volvió a salir porque otra vez escuchó ruidos. Ahí se le apareció uno por detrás, le puso una escopeta en la cabeza y le dijo que si no abría la puerta le iba a pegar un tiro en la cabeza", afirmó A.H.

El hombre intentó resistirse, pero cuando quiso acordar apareció otro sujeto en la escena, también armado (al parecer con un revólver), y ya nada pudo hacer para evitar que los delincuentes, tapados con cuelleras y capuchas, entraran a la vivienda.

Tamaña sorpresa se llevaron la esposa y la hija cuando los dos ladrones entraron con A.G.H con un arma en la cabeza. Los sujetos llevaron a los tres a una habitación y allí los ataron, los golpearon y amenazaron.

"Nos decían que ellos no tenían para comer y que nosotros estamos muy bien, que solamente querían toda la plata. A mí me taparon la boca y me pegaron con la culata de la escopeta en la cabeza y en los labios. Y a los tres nos ataron con las tiras de una hamaca", recordó la chica.

Uno de los momentos mas dramáticos fue cuando el jefe de hogar intentó otra vez resistirse. Fue cuando observó que los ladrones estaban maltratando a su mujer. "Ahí lo ataron a él y le pegaron mucho, en la cabeza y en la nuca", comentó.

Los malhechores estuvieron alrededor de 15 minutos en la propiedad, revisando todos los rincones. Se llevaron una planchita para el pelo, dos celulares, un televisor, parlantes, elementos de albañilería, entre otras cosas.

Pero su objetivo al parecer era dinero. "Nos amenazaban con que si encontraban la plata que nosotros decíamos que no teníamos nos iban a gatillar a los tres, nos iban a matar", contó A.H. La familia no mentía y les entregaron los únicos $1.800 que tenían.

"Es la primera vez que nos pasa algo así. Fue todo muy feo, no se lo deseamos a nadie", cerró la chica.

La Policía investiga para dar con los autores del hecho.