Buenos Aires, 4 de enero.- El episodio comenzó pasadas las 21 de anoche, en el autoservicio de propietarios chinos instalado en Juan Manuel de Rosas al 1000, a mitad de cuadra entre Las Heras y Sargento Cabral de esa localidad del partido de La Matanza, provincia de Buenos Aires.

Al menos tres asaltantes irrumpieron para robar la recaudación del comercio, pero el oportuno aviso de un vecino que vio movimientos sospechosos y la inmediata respuesta policial derivó en que los ladrones fueran copados en el local.

Los ladrones se atrincheraron entonces tras la cortina metálica que sella el único acceso al local, con las personas que estaban en el interior como rehenes, incluido un matrimonio joven chino con un hijo pequeño. A las fuerzas policiales que inicialmente llegaron al lugar, en jurisdicción de la comisaría Noreste Segunda de La Matanza de la Policía Bonaerense, se añadieron refuerzos, un pelotón del Grupo Halcón, de operaciones especiales, y preventivamente también bomberos y personal sanitario.

En tanto, periodistas y vecinos fueron ubicados fuera de un perímetro establecido por la policía a 50 metros de la entrada del comercio, y luego corrido otro tanto más lejos. Un negociador tomó contacto con los secuestradores y, aunque se desconoce en qué términos dialogó con ellos, logró resultados óptimos.

A la 1.35 se abrió la pequeña puerta de la cortina metálica del autoservicio y salieron dos mujeres jóvenes, presuntamente dos de los rehenes; menos de 15 minutos después abandonó el local otra mujer con un niño pequeño en brazos, y dos minutos más tarde lo hicieron dos hombres jóvenes. Todos sanos y salvos.

Unos pocos minutos después, cuando aún no habían dado las 2, empezaron a salir por la misma puerta de chapa los integrantes de la banda, tres en total, con las manos en la nuca, que fueron siendo detenidos por la policía. Un pelotón del grupo Halcón ingresó entonces en el local para registrarlo minuciosamente, pero la toma de rehenes había terminado y nadie resultó herido.