Chicas con los ojos llenos de lágrimas. Parientes y amigos reunidos en pequeños grupos en la playa de estacionamiento de la sala charlando en voz baja, quizá intentando hallar alguna explicación al inesperado final de la familia. Otros, apoyados en los hombros de algunas mujeres, llorando sin consuelo. Esas eran algunas de las escenas de profundo dolor que se vivieron ayer en la noche entre familiares, amigos y conocidos en el velatorio de José Orlando Gómez (60 años, gremialista), su esposa Silvia Cristina Trujillano (55), su hija Gisela Anahí (32, embarazada de 8 meses) y su esposo, Martín Santiago Gómez Herrera (31), los sanjuaninos que viajaban a Buenos Aires y que murieron el martes en la mañana en un impresionante choque frontal contra un camión en la provincia de San Luis. En el medio del duelo, familiares de Martín Herrera, impotentes, reprocharon la maniobra temeraria que se le atribuye al gremialista durante una curva en bajada y con doble línea amarilla en la ruta 147, que terminó por desencadenar la tragedia.

Ayer, alrededor de las 20.20, los cuerpos de la familia fallecida fueron trasladados a una cochería de Trinidad. Durante el velatorio, Felipe Herrera, tío de Martín, explicó que en el seno de su familia, más allá del inmenso dolor por la pérdida, había malestar por la maniobra imprudente que desencadenó la tragedia.

"Creo que el accidente se produjo por un desconocimiento del hombre sobre el rodado. Ellos siempre han tenido vehículos con cajas manuales y al manejar un auto nuevo, de caja automática, pudo haberle jugado una mala pasada al hombre. Uno debe conocer el vehículo en el que viaja, adaptarse y saber hasta dónde da. Pero más allá de eso, el malestar nuestro es porque hizo una maniobra prohibida donde no debía, en una curva con doble línea amarilla", señaló Herrera, dolido. Y agregó: "esto tiene que servir de experiencia para todos aquellos que anden en las rutas, para que sepan que de un segundo a otro puede ocurrir una desgracia. Las rutas no son para inexpertos ni para confiados".

Hoy, los cuerpos de los cuatro sanjuaninos serán sepultados a las 9 en el cementerio "Parque El Mirador", en Rivadavia.