Ernesto Clavijo, Patricio Yanzi y Pablo Manzur (tres abogados civilistas y laboralistas) protagonizaron ayer un cruce con tintes de escándalo en un Juzgado laboral y en la calle. Tanto, que de los insultos pasaron a las trompadas y todos terminaron demorados unas horas en la comisaría 1ra. de Capital, donde hubo denuncias cruzadas por lesiones y amenazas, dijeron fuentes policiales y judiciales.
Ayer, este diario intentó conocer por boca de algunos de los protagonistas lo que había pasado, pero Yanzi calificó el hecho como "un altercado de entrecasa" y prefirió no hacer declaraciones. Y un allegado a Clavijo dijo que no estaba en su estudio y no tenía el teléfono de su casa.
El problema es de vieja data y al parecer tiene como foco de conflicto una supuesta deuda de 10.000 pesos que -dijeron las fuentes- Clavijo reclamaría a su favor a los otros letrados a través de un documento. En Tribunales aseguran que la semana pasada Clavijo denunció por presunta coacción a los otros abogados en la Justicia de Instrucción, y que ayer en la mañana discutió con Manzur momentos antes de ingresar a una audiencia con un cliente en el Primer Juzgado Laboral, en el primer piso de un edificio en Laprida al 26 Oeste, Capital.
Quienes conocieron el hecho aseguran que luego de ese altercado, alrededor de las 11, Yanzi ingresó al Primer Juzgado Laboral donde cruzó insultos y golpes con Clavijo quien, al parecer, en ese cruce llevó las de vencer. Un ordenanza, un abogado y el encargado de la mesa de entradas del Tercer Juzgado Laboral debieron separar a los contendientes, dijeron fuentes judiciales.
Según las fuentes, luego de ese cruce Yanzi fue asistido en una cocina de un Juzgado y Clavijo bajó a la planta baja, donde se cruzó con Manzur y entonces volvieron a producirse insultos e intercambio de golpes, incluso en la calle y ante policías y otros testigos.
En la policía aseguran que los letrados denunciados por Clavijo, incluso insultaron a los policías que intentaron intervenir, y que al final lograron que todos fueran hasta la comisaría 1ra. donde quedaron demorados unas horas hasta que el juez en lo Correccional, Enrique de la Torre, ordenó su libertad cerca de las 18.
Para entonces, los abogados habían cruzado nuevas acusaciones con su versión de los hechos en un sumario policial, en el que también se habrían registrado los testimonios de los policías.
Cuando el sumario concluya, los implicados darán sus versiones en el Primer Juzgado Correccional donde se evaluarán las pruebas, previa intervención de fiscalía, para determinar cómo se resolverá el escandaloso episodio.