Implacable, destructivo. Así resultó un incendio que arrasó la noche del miércoles gran parte de una vivienda ubicada en el barrio Cooperativa Villa María, Santa Lucía. Y pudo terminar en una tragedia, porque el siniestro se originó por una presunta falla eléctrica en un acondicionador de aire de la habitación donde el dueño de casa descansaba. Camas, muebles, ropa, libros, ventiladores de techo y aires acondicionados fueron destruidos por las llamas. Afortunadamente, el hombre (el único que estaba en la vivienda) se despertó a tiempo y pudo escapar. No así dos de sus mascotas que murieron asfixiadas por el intenso humo, afirmó la hija del damnificado. Finalmente, unos vecinos y después los bomberos, controlaron el incendio antes de que destruyera el resto de la vivienda.
Según Verónica, hija de Roberto González (58 años, comerciante), su padre descansaba en una de las habitaciones que comparten en Jacarandá al 888. "Yo no estaba porque me fui a cenar a la casa de una amiga", dijo la chica.
Eran las 23.30 del miércoles cuando González se despertó abruptamente en medio de un denso humo. Como pudo, salió hacia la calle. Unos vecinos se acercaron y empezaron a combatir el incendio.
González reingresó a la casa para salvar a sus dos perros que estaban encerrados en el lavadero. Pero fue inútil. El fuego se había propagado en 4 dormitorios, un baño y parte del comedor de la casa, describió la hija.
Una dotación de bomberos llegó y combatió el incendio que destruyó 4 ventiladores de techo, 3 aires acondicionados, un televisor y muebles. Después, una ambulancia llevó a González al Hospital Marcial Quiroga por una afección respiratoria, que no fue grave, señalaron.
"Los bomberos nos dijeron que fue una falla eléctrica en el aire. Por suerte mi papá está bien", relató agradecida Verónica González.

