El juez Pablo Flores entendió que no cabía aplicar la extinción en favor de un joven acusado de violar a su hermana menor.

El más insólito y polémico de los casos de extinción de la acción penal, fue rechazado por el juez de Instrucción Pablo Flores. Se trata del "perdón" de una pareja de Valle Fértil en favor de su hijo de 21 años (preso por violar a su hermana cuando tenía 14 años) al que le aceptaron $10.000 en nombre de su hija, a la que hicieron firmar el acuerdo para que todo quede en nada, es decir que la causa se archive. El caso, había sido denunciado por una psicóloga del municipio el 8 de octubre del año pasado.

La extinción de la acción penal rige desde junio de 2015 y se incorporó en el artículo 59 inciso 6 del Código Penal. Básicamente, le permite a la víctima de un delito dar por concluido un caso penal, por "conciliación o reparación integral del perjuicio" con el victimario. La polémica en San Juan se da porque aún no se decide por ley cómo y para qué delitos se aplicará.

Esa reforma invocó Fernando Bonomo, abogado defensor del joven sospechado (está preso con prisión preventiva), pues entendió que el hecho de que aún no se legisle cómo debe aplicarse en San Juan, no es obstáculo pues se estaría afectando el derecho de igualdad ante la ley de su cliente.

Sin embargo el planteo mereció el firme rechazo de la Fiscalía y la Asesoría de Menores. El fiscal del caso, Daniel Galvani, entendió que había por lo menos dos razones para no avalar semejante acuerdo.

A la mencionada ausencia de legislación local que hace inoperante la reforma en la provincia, le agregó una razón de igual o mayor peso: el hecho de que se trata de una menor (considerada vulnerable por ley) que no puede ser representada por sus padres, por los intereses contrapuestos, es decir que no pueden actuar en favor de un hijo y en contra del otro.

Este último argumento llevó al fiscal a considerar que la titularidad de la acción jamás dejó de ser de la Fiscalía, ya que, además, los padres no habían denunciado. El juez Flores adhirió a estos argumentos y, en consecuencia, el "violador" seguirá preso.