"Tengo una bomba y los rehenes están bien. Si se mete la policía, activo la bomba". Esa fue la constante amenaza que un joven delincuente usó ayer para mantener a unas 40 personas de rehenes durante unas 5 horas en la sucursal de Pilar del Banco Nación. El sospechoso llegó con tres cómplices, que huyeron con algo de dinero en medio de un tiroteo con custodios. Pero uno de ellos no escapó y entonces se atrincheró aunque al final se entregó ante los medios y los rehenes fueron rescatados ilesos.

Todo comenzó minutos después de las 12 cuando los ladrones, a bordo de un Peugeot 206, irrumpieron a punta de pistola en la sucursal bancaria donde había unas 40 personas, entre ellas mujeres embarazadas y jubilados.

El joven y al menos tres cómplices se tirotearon con los custodios. Eso puso en fuga a tres de los ladrones con dos bolsas de dinero, aunque una se les cayó. Para entonces "El Cheto" o "El Chilenito" (20), no pudo escapar y se atrincheró con todos en el banco.

Luego, el malviviente pidió a través de los medios la presencia de su pareja y su pequeña beba. Eso fue clave para que el joven se entregara mientras los rehenes eran liberados.