Una banda de al menos tres delincuentes se alzaron ayer con unos 4.000 pesos en efectivo, celulares y dos motos con los cascos de sus conductores, tras reducir a unas seis personas en una céntrica financiera. Luego de atar y encerrar en una habitación a sus víctimas, los delincuentes huyeron en las motos sustraídas, aunque después las abandonaron (sin casco y sin llaves) en una de las calles internas del hospital de Niños Juan Carlos Navarro, dijeron fuentes policiales.
Todo ocurrió entre las 13,30 y las 14 de ayer en la sede de la empresa identificada en la policía como "Crediale’, apostada en el 486 Este, casi Aberastain, en Capital.
Según la policía, dos de los delincuentes se abrieron paso al interior de las oficinas luego de tocar el timbre y hacerse anunciar como personal del servicio de recaudación que llegaba con el dinero de los cobros a clientes, como pequeños comerciantes.
Para no despertar sospechas, uno de los ladrones tenía puesta una campera de una empresa de seguridad privada y su cómplice estaba bien vestido. Cuando les abrieron, sacaron armas y con la ayuda de un tercer cómplice con el rostro cubierto, redujeron a cuatro empleados, incluida una mujer, que cumplían tareas a esa hora del día. Ya con las víctimas reducidas, se dedicaron a revisar en busca de dinero, sin éxito, y al final esperaron varios minutos a que arribaran los verdaderos recaudadores con el dinero.
Cuando estos dos últimos trabajadores entraron, también fueron encañonados y obligados a entregar la plata que traían (unos 4.000 pesos), más los cascos y las llaves de las dos motos Yamaha 125cc. que conducían, y que luego aparecieron abandonadas en el predio del hospital de Niños sin cascos y sin llaves, precisaron las fuentes.
"Por el modo en el que actuaron podríamos decir que el que entró cubriéndose el rostro sería el apoyo local y los dos que actuaron a cara descubierta podrían ser cordobeses por el tono de voz que mencionan los empleados. Lo que sí está claro es que no son ningunos improvisados y tenían información bastante precisa sobre los movimientos del lugar. Por eso no descartamos la presencia de algún entregador”, dijo ayer un jefe policial ligado a la investigación. Anoche, policías de la Comisaría Primera y de la Brigada de Investigaciones buscaban pistas para dar con los asaltantes.