Carolina Vargas (19 años) había recorrido unos metros desde su casa rumbo al centro de Los Berros con su pequeño Tiago (11 meses) en un cochecito, cuando entró en escena la muerte.

Desde atrás, un auto los embistió a un costado de la ruta 153, unos 60 metros al Este del Callejón Narváez, en Los Berros, Sarmiento, y desde ese momento todo esfuerzo fue inútil: un vecino levantó al bebé y lo llevó a mil en su camioneta al microhospital, pero cuando llegó el médico Miguel Ángel Carrizo nada pudo hacer: ‘Se le hicieron las maniobras de reanimación pero venía broncoaspirado, con sangre en los pulmones. Falleció prácticamente en el acto’, dijo el profesional.

A la mamá de Tiago la llevaron en ambulancia a Media Agua, pero también fue en vano: su suerte quedó sellada antes de llegar al hospital, dijeron fuentes policiales.

La doble tragedia que conmociona en Los Berros, ocurrió alrededor de las 20.45 del sábado, cuando Carolina y su hijo transitaban hacia el Oeste, igual que el conductor que los atropelló desde atrás, el empleado municipal mendocino Ricardo Daniel Zuchetti (62). El hombre vive en el barrio 26 de enero, en Las Heras, y llegaba a Los Berros en un Dodge 1500 con su esposa y un hijo a ver a otra hija, mujer de un primo de la joven fallecida.

Zuchetti habría dicho que viajaba despacio cuando vio un bulto que se le atravesó y nada pudo hacer. Sin embargo vecinos del lugar dicen que el hombre se metió a la banquina y los arrolló, lanzando a gran distancia el changuito del bebé.

Según la familia de Carolina, la joven había terminado el secundario y aunque las autoridades escolares no la dejaron ir al viaje de fin de curso a Chapadmalal por su hijo, el último sábado celebró con sus compañeros en el baile de egresados. También dijeron que su plan inmediato era el festejo del primer año de Tiago, que ya caminaba, el próximo 29 de diciembre.

Y que el año próximo pensaba seguir estudiando. Ayer, los restos de ambas víctimas eran velados en el salón parroquial de Los Berros en medio de escenas de profundo dolor.