‘No entiendo cómo pueden dejar que ande por la calle una persona que tiene problemas psiquiátricos. Encima me llamó y me mandó 3 mensajes de texto pidiéndome perdón por lo que había hecho. A raíz de este incendio, me quedé sin nada, perdí todas mis cosas, mis elementos de trabajo y se me murieron 3 mascotas’. Victoria Lara (33), periodista y productora que trabaja en Radio Nacional, así se refería ayer al drama que le tocaba vivir luego de que se incendiara su casa ubicada en calle Calingasta al 33, en el Bº 24 de Noviembre, Rawson. Y la joven no tuvo reparo en acusar y denunciar en la Policía a su exnovio, un joven que tendría alteraciones mentales y que es hijo de un empresario, de haberle quemado la vivienda en su ausencia. Las llamas destruyeron aparatos, muebles, ropa, documentación y terminaron con la vida de una perra y 2 gatos, indicó la damnificada.
Según Lara, en febrero último conoció a Urbano Sáenz (30, hijo del empresario que tiene locales de ropa deportiva) y en los primeros meses de relación todo iba bien. Hasta que hace 2 meses, el muchacho comenzó a comportarse en forma extraña: “Me quiso regalar un celular y como no lo quise, lo rompió adelante mío. Después hizo lo mismo con unos artículos de limpieza. Empezó a comportarse raro. Quería irse a vivir conmigo y al enterarme que tenía problemas psiquiátricos, me alejé”, dijo la periodista.
Ayer a las 10, la joven salió a comprar alimento para sus mascotas y regresó cerca de las 12. Antes de llegar a su casa recibió un llamado de Sáenz. “Me dijo “llamá a los bomberos” y cortó. Cuando llegué a mi casa, me topé con la casa quemada”, señaló la joven. El fuego destruyó un TV LCD de 32’, 2 aires acondicionados, un grabador, 2 notebooks, 2 PC, una cocina, una heladera, un órgano musical, ropa, muebles y dañó 4 ambientes. “Hay una vecina que lo vio bajarse de un remís y entrar al fondo de mi casa. Parece que tiró algo con fuego en mi pieza. Después que quemó mi casa me mandó mensajes. En uno me pedía disculpas por lo que hizo, en el otro que le llamara al padre para que me pagara todo. Y en el último me decía que pensaba que me había muerto en el incendio. Una locura”, dijo Lara, entre lágrimas.