� La tragedia golpeó por partida doble a una familia en menos de 48 horas. Como si no hubiese sido suficiente con el dolor por el fallecimiento de la madre enferma de cáncer, sobrevino la muerte de su hijo que justamente había venido de San Luis a darle el último adiós. A horas nomás del sepelio, y cuando volvía de dejar a unos parientes en el Sur de la provincia, el muchacho volcó con su auto ayer por la tarde a un costado de la ruta 40 en Pocito y perdió la vida. En el coche también viajaban su mujer y su nene, que resultaron heridos.

Esta vez, el cinturón de seguridad no sirvió de nada. Y es que Adolfo Ceferino Quiroga (35), quien llevaba puesto el cinturón, fue el único que murió dentro de ese auto Volkswagen Golf que se salió de la ruta 40 y quedó dado vuelta en el km 3444, entre las calles 14 y 15. Fany Rosario González (38) y su hijo Tiziano (3) salieron despedidos del vehículo, aparentemente por no tener puestos los cinturones, e increíblemente se salvaron: ambos sufrieron distintos golpes, pero ninguno de gravedad, indicaron en la Policía.

Quiroga junto a su mujer y su nene habían llegado desde San Luis (el hombre trabajaba en una empresa puntana) la semana pasada para ver a su madre Justa Antonia Paez de Quiroga que estaba internada a raíz de su grave enfermedad, contó un pariente. La mujer finalmente falleció el domingo a las 8 de la mañana y ayer en la siesta fue sepultada en el cementerio de Pocito. Tras la despedida, Adolfo Quiroga supuestamente llevó a unos parientes hasta Carpintería. De ahí volvía en su auto a eso de las 18.15, rumbo a la casa de sus padres en inmediaciones de Gral Acha y 5 en Rawson, cuando sufrió el fatal accidente.