La policía buscaba ayer testigos o cualquier pista que los llevara a dar con el ciclista que, el último sábado, se atravesó en el camino de un empresario turístico que viajaba con su familia en una 4×4 y terminó envuelto en un trágico desastre: El hombre se cruzó de carril y de milagro no chocó a nadie, pero terminó a los tumbos con su vehículo, su mujer y sus cuatro hijos. La consecuencia fue muy desgraciada: Eduardo Paredes (43) murió igual que su hijo Santino (3 años, mellizo de una nena que se salvó). Todo pasó alrededor de las 17.20 cuando Paredes y el buscado transitaban hacia el Sur por ruta 40, metros al Norte del cruce con calle 6 en Pocito.

Resolver el caso es una de las prioridades de los policías de la comisaría 6ta. al mando del comisario inspector Juan Albornoz, quienes desde el mismo momento del desastre comenzaron a buscar pistas para dar con el sospechoso, algo que ayer no conseguían.

Por eso es que pedían la colaboración de la gente, aunque sea en forma anónima, pues varios testigos del siniestro aseguraron ese sábado que todo pasó cuando uno de los ciclistas que viajaban delante de Paredes, se atravesó imprevistamente (¿estaba ebrio?) y luego de ver el desastre que causó huyó del lugar sin que hasta el momento se sepa quién es para que asuma su responsabilidad por la desgraciada maniobra que le atribuyen.