Conocedor de algunas reglas para no quedar muy comprometido en caso de ser capturado, José Vicente Delgado (exconvicto) se cuidó de no usar la violencia cuando se metía en propiedades ajenas de Pocito (fincas y al menos un taller metalúrgico) para sustraer lo que consideraba de mayor valor: amoladoras, máquinas de soldar, rollos de membranas, bombas de agua, una máquina clavadora.
Su esmero, sin embargo, pareció dejar de lado un detalle clave: las cámaras de seguridad. Fue por esas imágenes que su particular Chevrolet Corsa verde se convirtió en objeto de pesquisa para los policías de la UFI de Delitos Contra la Propiedad dirigidos por la fiscal, Claudia Salica, y la ayudante fiscal, Ximena Rodríguez.
Y Delgado no tuvo escapatoria. Por eso ayer, a través de su abogada defensora, Ivana Salas, decidió que lo más conveniente era reconocer que esos cuatro hechos de hurto cometidos entre el 8 y el 22 de abril pasado, maniobras por las que acordó con la fiscal (hoy subrogada por el fiscal Cristian Gerarduzzi) la pena de 4 meses, que están a punto de cumplirse, pues le habían dictado 4 meses de prisión preventiva el pasado 9 de mayo.
La jueza, Flavia Allende, homologó ese acuerdo y condenó al imputado.

